my pet!

martes, 22 de diciembre de 2009

Estoy cansada.

Si supieras la cantidad de cosas que tengo para decirte y preguntarte. Quisiera reprocharte millones de cosas pero tampoco tengo ganas de hablar tanto hasta quedarme sin voz.

Solo voy a empezar preguntándote desde cuándo son así las cosas; desde cuándo está así nuestra relación. Intento buscarle un momento en el tiempo, pero se me hace imposible, y más imposible es intentar relacionarlo con algo. Es que sí, eso es otra cosa que me pregunto constantemente, por qué es que están las cosas así. Se me pueden ocurrir mil respuestas, pero no encuentro una lo suficientemente razonables como para que sean suficientes para que esta situación esté así. Me cuesta imaginarme que es por algo en especial.

Si tengo bien en claro el momento en el cual se cortó mi confianza hacia vos. Por lo general intento no recordarlo, porque la verdad, que las cosas que dijiste, vos y tu cómplice no fueron ni un poco lindas. Creo que lo que más me dolió no fueron las palabras en sí que me lanzaste; simplemente que vos, justo vos, me lo hayas dicho. De la otra persona en cuestión lo podía esperar, pero que vos me pidas esas cosas, que vos me grites esas cosas, me dolieron en el alma. Si lloré, repito, no fueron las cosas horribles que dijiste sobre mí, fue más la cuestión de que una persona en la que confiaba ciegamente, me estaba diciendo cosas del estilo. Jamás me lo hubiera esperado de tu parte. Y pese a sentir que se quebró mi confianza en vos, yo seguí como una pelotuda, haciendo de cuenta que estaba todo bien. Te digo que la caretee bastante bien, y según tengo entendido vos también, pero al parecer no fue más que una simple careteada.

Estoy cansada de estar en esta situación de mierda, y lo digo así porque no existe otro adjetivo para esta sensación. Ver que ya no puedo confiar en vos, que las cosas en dos segundos cambiaron, me duele. Pensarás que no sufro cuando hay una discusión, pero pensas eso simplemente porque no te lo demuestro. No me gusta demostrarte que logras lo que querés, demostrarte que soy débil. No me gusta, y no lo pienso hacer.

Podría decir que “haría cualquier cosa porque las cosas cambien, y sean lo que eran antes”, pero no lo digo, porque si eso implica, cambiar mis principios, y dar por sentado que tenés razón en todo, cuando la realidad, es que en TODO no la tenés. Lamento desilusionarte, pero nadie tiene razón en todo, y mirá que me cuesta aceptar que yo muchísimas veces tampoco tengo la razón, pero es así, estaría bueno que vos también lo entiendas y abras un poquito tu mente. Es lo único que pido, que me des una oportunidad para demostrarte que las cosas no son como vos pensás que son, que la realidad rompe tu mundo de fantasía en el cual tus razones, son las reales.

Lamentablemente siento que esa oportunidad que me podrías dar, no va a llegar nunca, me encantaría demostrarte que no soy como pensás que soy, que las cosas no son como están en tu mente, pero bueno, podrían llegar a pasar años hasta que llegue esa oportunidad, pero eso no implica que yo voy a quedarme con los brazos cruzados, y aguantándome tus caprichos. Me voy a hacer escuchar, que no te quepa duda de eso.

Que esté diciendo todo esto de esta manera, es porque por ahora no me queda otra, y tampoco significa que dejé de quererte ni de admirarte en ciertas cosas. Sé bien que pese a lo malo que tenés en vos, también hay algo bueno, al igual que yo, al igual que todo el mundo. No pido que seas una persona perfecta, tampoco que nuestra relación sea perfecta, simplemente, pido que abras un poco tu mente, y hagas un lugar para escucharme, a mí y a mis versiones.

Te quiero infinitamente.

jueves, 17 de diciembre de 2009

Malgré les nerfs, Pamela a approuvé l'examen avec un neuf cinquante (9,50). Cela signifie qu'elle a de pleines vacances jusqu'à un mars.

martes, 15 de diciembre de 2009

Historia, aprobada.
Francés, en unas horas veremos.

sábado, 12 de diciembre de 2009

Y estamos más juntos y cerca que nunca.
Si todo lo que te lastima el tiempo lo hace durar,
hasta que seas consciente que no te hace daño.
Si yo no se lo digo a nadie, pero me di cuenta,
que pudo ser peor, que no fue para tanto.
Ya no hay dolor...
Ya no duele y no va a doler.

jueves, 10 de diciembre de 2009

Querido diciembre:
.                               Dame un verano sin fin.

La historia de mi amiga [la escribí hace un año]

Era la historia más linda que yo conocía desde que tengo noción de la vida, mi amiga estaba feliz con él, y yo feliz por su alegría. Yo estaba tan contenta pensando en que por fin, un chico valoraba a la clase de persona que es ella, porque se lo merecía después de sufrir por tanto tiempo. Es que juro que parecía tan real, pero bueno, no voy a empezar desde el final, voy a contar bien todo. Él era lo que toda la vida habíamos soñado con mi mejor amiga, el príncipe azul, era perfecto, o eso aparentaba. Nosotras, cuando éramos muy chiquititas, soñábamos con un chico como él, un caballero con todas las letras, que iba a llegar con su carroza, a buscarnos en cada salida, y mimarnos, y abrazarnos, y querernos y entendernos, y besarnos. Y lamentablemente con cada chico que aparecía creíamos en ese cuento. Hasta que nos cansamos de ilusionarnos con las cosas que le decían y jamás cumplían. Con Maru creíamos que eso igualmente existía, y en el momento en que apareció Nicolás pensamos que él era el indicado para ella, que él si era ese príncipe Aladín que iba a buscar a su princesa Jazmín. Era tan bueno con ella, le decía cosas tan lindas, y le hacía tan bien a ella, a tal punto de que logró que mi amiga cambie. Pasa que ella, había sufrido tanto, que se dedicó a hacer la suya, pero cuando llegó él, dejó de lado esa vida. A mí me encantaba que ella viniera y me contara todo, porque era como mi novela de la tarde, pero en la vida real, la podía ver en vivo y directo, y eso no pasaba todos los días. Ella estaba tan enamorada, y yo tan ciega, creyendo que él era perfecto, y que era lo que aparentaba ser. No era mi novio, era el de mi mejor amiga, pero, juro que las cosas que le decía a ella, compraba a cualquiera. Y a nosotras nos compró, y digo nosotras, porque somos como una misma persona. Nicolás era un señor para la edad que tenía, la llevaba a comer a restaurantes muy elegantes, le hacía regalos constantemente, la llevaba al cine, al teatro, era muy respetuoso de todo, y lo mejor de todo… los padres de Maru lo amaban. Obviamente no todo es color de rosas, y nosotras sabíamos que en todo cuento de hadas hay problemas y peleas, y dicho y hecho sucedió con ellos. Pero se arreglaban al ratito, llamaba uno o el otro, pidiéndose perdón, y tomando esas pequeñas peleas como pruebas que tenían que pasar para ser feliz un 100%. Cada cosa que me contaba Maru de ellos me ponía más contenta, a tal punto de querer tener yo un chico así, aunque mis esperanzas eran muy bajas. Nostras hablábamos diariamente, pero los viernes a la noche eran nuestros, siempre, desde chiquitas y nunca había cambiado, y para nuestra sorpresa, Nicolás no tuvo problema alguno en dejárnoslo. En esos viernes nos divertíamos a más no poder, ella siempre, obviamente, fiel a su amor. Una noche, conocimos a unos chicos, y yo empecé a salir con uno de ellos, Agustín. No era como Nico, pero valía la pena jugarse. Nos empezamos a conocer, y un día que nos pusimos a hablar de la vida, me contó que tenía un amigo "re capo" que "estaba de novio", pero que la minita era re cornuda. En esa conversación me empezó a contar cómo era el chico, a describírmelo, y me dijo que tenía una foto de la chica. Fuimos hasta la computadora, y yo no podía creer lo que me estaba mostrando Agus, no podía ser, seguramente se había equivocado de foto. Debía estar muy pálida porque me preguntó si la conocía… obvio que si, era Maru, mi mejor amiga de toda la vida! Así parecía ser… el flaco que me enganché, era amigo de Nicolás, y encima lo veneraba por hacer cornuda a la novia sin que ella sospeche nada. Mi primer paso fue dejarlo a Agustín, no valía la pena si yo sabía que además de ser amigo del traidor, lo respetaba por lo que hacía, por jugar con los sentimientos de una chica. Después no sabía qué hacer, no sabía cómo decírselo a Maru, porque yo sabía que se iba a lastimar, mucho, y la verdad que no me gusta verla sufrir. Pero tampoco podía dejar que siga quedando como una tarada, no podía dejar que ese pibe se vuelva a acercar a mi mejor amiga. La llamé, le dije que tenía algo importante para decirle, y salimos a dar una vuelta. En el momento “indicado” (jamás existe un momento indicado para hacer sufrir a alguien, ni para enterarse de un engaño), se lo dije. No me acuerdo las palabras exactas, pero intenté ser lo más sutil posible. Su carita, por dios, no me la borro nunca más, la expresión suya de ese momento me enferma de dolor de solo recordarla. No lo podía creer, y estaba boquiabierta, y lloraba sin parar, pero sin decir nada. No necesitaba hacerlo, la conocía más que nadie, y sabía con sólo mirar sus ojos que estaba dolorida. La abracé e intenté de hacerla olvidar, pero no hubo caso. Lo llamé yo a esta basura, y lo putée como nunca se lo deben haber hecho en su vida, era lo mínimo que se merecía. Me encargué yo misma de hacerlo quedar mal con todo el mundo, de escracharlo con todo lo que podía.

Es el día de hoy en el que mi amiga no puede olvidar, que no puede estar una semana sin haber pensado aunque sea por un segundo en él. Superarlo, lo hizo. Pero ahora le pone una barrera a todos, porque se le hace inevitable. Yo, como amiga, sufrí igual que ella, porque ella es mi amiga, y quién se mete con mi amiga, se mete conmigo; quién hace llorar a mi amiga, me hace llorar a mi; quién lastime a mi amiga, me lastima a mí; quién putea a mi amiga, me putea a mí. Jamás entendí cómo funciona esto de la amistad realmente, pero yo por ella no tengo una amistad, tengo un amor gigante, que jamás va a cambiar, sin importar lo que pase. A ella le da bronca haber caído una vez más en esas fantasías, haber vuelto a creer en un hombre. Pero yo le digo diariamente que no se preocupe, que todos cometemos errores, los mismos, o nuevos, pero siempre cometemos alguno porque simplemente somos humanos; pero que también tenemos amigos que nos curan el alma, nos hacen el aguante, e intentan evitar que una vuelva a cometer el mismo error. Pero cuando no lo logra, estos amigos caen junto a vos, y se vuelven a levantar para poder ayudarte a levantarte, porque todo es más simple y fácil si estamos juntos.

jueves, 3 de diciembre de 2009

5 años sin vos.

Cada año me cuesta más darme cuenta que es 3 de dicembre. Se me pasa tan rápido el tiempo, y se van sumando años sin verte.
Hasta hace poco jamás había pensado una posibilidad del por qué estoy medio bajón a principio de año y a fin de año, pero ya tengo aunque sea una... vos. Tu cumpleaños, en marzo, tu aniversario de muerte, diciembre. Otra razón, sinceramente, no se me ocurre. ¿Por qué otra cosa estaría bajón si me están saliendo las cosas casi bien?
Lo increíble es que no tengo todo el tiempo esta fecha en mi mente, intento de sacarmela, solo la fecha, a vos no, obviamenete. Pero de la nada, me cae la ficha, como ayer. Estaba con Leo y en un segundo, colgué, me encerré en mí, y tuve mil millones de imágenes en mi cabeza. Me preguntó qué me pasaba, le dije que al día siguiente (o sea hoy), se cumplían 5 años de tu muerte. Y me largué a llorar, fue instantáneo. Más tarde fue peor, no podía parar de llorar, me costaba respirar, y le contaba cómo había sido todo y las imagenes seguían en mi cabeza, cada vez con más detalles. [No tengo palabras para agradecerte amor].
[Ayer también me puse a pensar que te caería tan bien Leo]
Me haces mucha falta abu. Extraño jugar con vos como cuando era chiquitita. Escuchar Xuxa, que me lleves a merendar, robarte tu té con leche. Extraño simplemente verte.
Tengo terror que se me borre tu cara de mi mente. Tengo miedo de olvidarme de vos. No quiero, voy a hacer hasta lo imposible para que no pase eso. Deseo con toda mi alma que siempre estes en mí.
Me perdí de pasar tantas cosas con vos, te necesité tantas millones de veces. Siempre mejor dicho, pero hubo momentos que ya sean por malos o por buenos, que necesitaba estar a tu lado para compartirlos. Haber terminado la primaria, el viaje de egresados, la entrega de diplomas, entrar al pelle, llevarme materias, pasar a segundo, repetir, entrar en otro colegio, pasar de año, conocer nueva gente, peleas, etc etc.
Cambiaron tanto las cosas en estos cinco años. Te adoro abue.

I know you're in a better place
But I wish that I could see your face
I know you're where you need to be
Even though it's not here with me
I miss you

I miss your smile
And I still shed a tear
Every once in a while
And even though it's different now
You're still here somehow
My heart won't let you go
And I need you to know
I miss you.