lunes, 10 de agosto de 2009
Yo aprendí a ser feliz, y aún estando moribundo sonreí. También aprendí a vivir sin ti, cuando te necesité y no estabas aquí. No debiste volver, no debiste volver, ya yo te olvidé, tu amor es cosa de ayer. No debiste volver, no debiste volver, ya yo te olvidé, tu amor es cosa de ayer. Entiende qué se siente, tu corazón es un delincuente, que te roba lo que sientes y te deja casi en la muerte. Entiende soy diferente, y a tu trampa soy un sobreviviente. Tu abandono me hizo más fuerte, para tener el valor de decirte... No debiste volver, no debiste volver, ya yo te olvidé, tu amor es cosa de ayer. No debiste volver, no debiste volver, ya yo te olvidé, tu amor es cosa de ayer. Esta voz quebrantada te pide que te vayas y que ya no vuelvas. Dime cuántas veces yo he llorado, te he extrañado y no te ha importado.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario